Todas las epidemias o pandemias a lo largo de la historia no sólo han generado consecuencias sanitarias, también generaron grandes cambios culturales, políticos y económicos. En esta ocasión no será diferente. Debemos ser capaces de pensar en como convertir esta tragedia en una oportunidad. En un futuro donde los Estados estén del lado de la gente. Garantizando, entre otras cosas, sistemas de educación y salud que nos permitan que las nuevas generaciones se desarrollen con igualdad y libertad.